A lo largo de los siglos, la familia real británica ha sido objeto de intensa fascinación y especulación. Con una historia que se remonta a incontables generaciones, la casa real británica está impregnada de tradiciones centenarias, misterios intrigantes y secretos ocultos que han cautivado la imaginación de millones en todo el mundo.
Más allá de los ostentosos trajes, las ceremonias solemnes y los protocolos oficiales, se esconden una serie de curiosidades poco conocidas que ofrecen una perspectiva única sobre la vida dentro del palacio y las peculiaridades de sus miembros. Adéntrate en el fascinante universo de la realeza con estos 7 datos sorprendentes que no conocías sobre la familia real británica.
7 curiosidades sobre la familia real británica
1. El monarca celebra su cumpleaños dos veces al año
Es ampliamente conocido que la reina Isabel II solía celebrar su cumpleaños dos veces al año, pero ¿sabías que esta práctica tiene más de dos siglos de antigüedad? La tradición de tener un cumpleaños oficial y otro ceremonial se remonta al reinado del rey Jorge II en 1748. Nacido en noviembre, Jorge II decidió conmemorar su cumpleaños en junio durante la ceremonia de Trooping the Colour (el Día del Estandarte), aprovechando el clima más propicio para actividades al aire libre.
Esta peculiar costumbre ha perdurado hasta nuestros días. El rey Carlos III, al igual que su madre, celebra su cumpleaños oficial dos veces al año, una tradición que combina historia y practicidad.
2. El romance previo de Carlos III con la hermana de Diana
Antes de su matrimonio con Lady Diana Spencer, el príncipe Carlos tuvo un breve romance con su hermana mayor, Lady Sarah Spencer. Aunque su relación no perduró, este hecho revela los intrincados lazos dentro de la aristocracia británica y cómo un encuentro casual puede cambiar el curso de la historia.
Lady Sarah reveló en una entrevista que, si bien disfrutaba de la compañía de Carlos, no veía un futuro matrimonial con él. Sin embargo, desempeñó un papel crucial al presentar a su hermana Diana al príncipe, lo que eventualmente condujo a uno de los matrimonios más famosos del siglo XX.
3. Vuelos separados para los herederos
La seguridad siempre ha sido una preocupación clave para la familia real británica, y esto se refleja en una regla poco conocida que prohíbe a dos o más herederos viajar juntos en el mismo avión. Esta medida de precaución, establecida por el protocolo real, tiene como objetivo evitar una situación en la que múltiples miembros de la familia real podrían estar en peligro en caso de un accidente fatal.
Aunque esta norma se aplica estrictamente, hubo una excepción en 2014 cuando el Príncipe Guillermo viajó con Kate Middleton y su hijo Jorge a Australia, cuando el pequeño tenía solo nueve meses de edad. En esa ocasión, la norma fue infringida, probablemente debido a la corta edad de Jorge.
- ¿Te interesa todo lo british? Entonces Speak Up es para ti. Los suscriptores a nuestra web aprenden sobre la cultura, tradiciones y actualidad del Reino Unido, y al mismo tiempo mejoran su nivel de inglés. ¿Cómo? Gracias al método Speak Up, el único que te ofrece artículos exclusivos en inglés, cada uno con una versión en audio leída por un hablante nativo, glosario y una serie de ejercicios de comprensión lectora y auditiva. Suscríbete ahora a Speak UP y lee, escucha, practica y lleva tu inglés al siguiente nivel. Y para practicar inglés en cualquier momento y lugar, suscríbete a nuestro canal de Whatsapp: recibirás dos divertidos ejercicios interactivos flash cada día.
4. Monarcas sin apellidos en la monarquía británica
Aunque conocemos a la familia real como los Windsor, este no siempre fue su apellido oficial. Antes de 1917, los miembros de la familia real británica no tenían un apellido oficialmente reconocido. Sin embargo, durante la Primera Guerra Mundial, el rey Jorge V decidió adoptar el nombre de "Casa de Windsor" como el apellido oficial de la familia real, en un esfuerzo por distanciarse de sus conexiones alemanas en un momento de creciente sentimiento anti-alemán.
Desde entonces, el apellido "Windsor" ha sido sinónimo de la familia real británica, aunque en 1960 la reina Isabel II y el duque de Edimburgo decidieron que sus descendientes directos llevarían el apellido "Mountbatten-Windsor", combinando el apellido del duque con el nombre de la Casa Real.
5. El monarca no necesita un pasaporte ni un permiso de conducir
El monarca del Reino Unido, al contrario del ciudadano común, no necesita un pasaporte ni un permiso de conducir para viajar o conducir legalmente. Estos documentos se emiten en nombre del monarca, quien es la máxima autoridad en el país. Por lo tanto, la reina Isabel II y ahora el rey Carlos III pueden viajar internacionalmente sin un pasaporte formal y conducir sin un permiso de conducir.
No obstante, esta exención no se aplica a otros miembros de la familia real, quienes aún necesitan documentos de identificación y permisos de conducir válidos.
6. El monarca posee la mayoría de cisnes del Reino Unido
Tras el fallecimiento de la Reina Isabel II, el rey Carlos III ascendió al trono y con ello heredó un privilegio único: la propiedad de la mayoría de los cisnes en el Reino Unido. Este peculiar derecho se remonta a una antigua ley que designaba al monarca como el dueño de estos elegantes animales, en una época en la que eran considerados un manjar de gran prestigio en banquetes y celebraciones.
Aunque en la actualidad los cisnes están protegidos y su caza está prohibida, el rey Carlos III conserva su título como el principal propietario de estas majestuosas aves. El King's Swan Marker tiene la responsabilidad de supervisar su bienestar y conservación, llevando a cabo un censo anual llamado "Swan Upping". Este evento, que tiene lugar durante la tercera semana de julio, es más que una mera tradición. Es una operación de conservación que permite monitorear la población de cisnes, realizar chequeos de salud y aplicar tratamientos cuando es necesario. Dicha actividad no solo asegura la supervivencia de los cisnes sino que también ofrece una oportunidad para educar al público sobre la importancia de la conservación de la vida silvestre.
7. El rey Carlos no toca el tubo de pasta de dientes
Conocido como “pampered prince” (“el príncipe mimado") antes de su coronación, el rey Carlos III es famoso por su meticulosa rutina diaria. Según reveló Paul Burrell, antiguo mayordomo de la princesa Diana, en el documental de 2015 Serving Royals: Inside the Institution(Sirviendo a los Reales: Dentro de la Institución), el monarca tiene una serie de hábitos peculiares.
Desde el planchado diario de su pijama y de los cordones de sus zapatos, hasta el ajuste meticuloso de la temperatura del agua del baño y el tapón de la bañera colocado siempre en una posición determinada, la rutina del rey Carlos III está llena de rituales precisos y cuidadosamente ejecutados. Uno de los aspectos más destacados es la manera en que la pasta de dientes es dispensada en su cepillo todas las mañanas por sus asistentes, revelando un detalle íntimo de la vida real detrás de los muros del palacio.